A veces no le damos la importancia que tiene. ¿Sabías que en adultos sanos una deshidratación superior al 2% del peso corporal produce una disminución de la memoria a corto plazo e incrementa el dolor de cefalea? Parece mentira, pero es así. Por eso recopilamos los consejos que nos ofrecieron la Sociedad Española de Neurología y la Fundación del Cerebro para que tengamos el nuestro en perfecto estado.
1.- Protégete del calor. No importa la edad que tengas. Seguro que más de una vez cuando llegan los días de calor notas más cansancio o fatiga. Hay quienes padecen insomnio o sufren dolores de cabeza. Pues bien, el calor no es buen compañero de muchas patologías neurológicas, así que tenemos que tratar de evitarlo como podamos.
2.- Hidrátate bien. Es fundamental a cualquier edad y nuestro cerebro deja de funcionar correctamente si sufrimos deshidratación.
3.- Cuida tu alimentación. Tenemos a la joya de la corona, así que no lo dudes y apúntate a la dieta mediterránea y trata de incluir todos los alimentos que puedas ricos en agua.
4.- Ten horarios organizados. Sí, es verano, vacaciones y muchas veces decimos adiós a la rutina, pero es necesario que sepamos que el orden ayuda a que nuestro cerebro esté tranquilo. Y, por supuesto, no te relajes si tienes que tomar alguna medicación.
5.- Evita los cambios bruscos de temperatura. Aquí hay que tener especial cuidado con los aires acondicionados, los alimentos o bebidas muy fríos y, por supuesto, los cambios bruscos de temperatura al meternos al agua.
6.- Realiza ejercicio a diario. No hace falta que lleves el mismo ritmo que el resto del año, pero sí que te mantengas activo (siempre en las horas en las que no haga mucho calor). El ejercicio nos ayuda a mejorar el estado de ánimo y nuestra memoria y además nos ayuda a controlar a una de las grandes enemigas del cerebro, la hipertensión. Y si el deporte requiere de casco, aunque haga calor, póntelo, es importante proteger nuestra cabeza de posibles agresiones externas.